¿En qué consiste?
La toxina botulínica, también conocida como “botox”, es un tratamiento efectivo para prevenir y tratar los signos de envejecimiento faciales.
Esta sustancia tiene como finalidad relajar parcialmente los músculos del rostro, responsables de las arrugas, pero sin restar expresión facial. Su infiltración suaviza y atenúa las arrugas, logrando un aspecto más relajado y joven.
La toxina botulínica tiene mala prensa, debido a que en ocasiones la asociamos a procedimientos mal realizados y caras artificiales e inexpresivas. Sin embargo, debes saber que el tratamiento aplicado por médicos experimentados logra un resultado natural y relajado.
En la consulta te realizaremos una valoración individual, analizando las características de tu rostro y proponiéndote el tratamiento que más te convenga para lograr un aspecto más joven y obtener resultados naturales y duraderos.
Preguntas más frecuentes
Duración de intervención
Aproximadamente 15 minutos, en consulta
Tipo de anestesia
Ninguna o tópica
Ingreso
No requiere, se realiza en consulta
Tiempo de recuperación
Inmediato
Resultados
A partir de 48-72 horas
Duración de resultados
Hasta 6 meses
¿Qué se puede mejorar?
- Atenuar o prevenir las arrugas de la frente, entrecejo y patas de gallo
- Lifting de cejas: elevar la zona lateral de las cejas, consiguiendo una mirada más joven, expresiva y menos cansada
- Corregir la sonrisa gingival
- Bruxismo: relajar el músculo masetero
- Hiperhidrosis o sudoración excesiva

¿Cómo se aplica la toxina botulínica?
El tratamiento se realiza en consulta. El botox se aplica mediante pequeños pinchazos, apenas perceptibles gracias a que la aguja es muy fina.